Preparan programa piloto para conocer necesidades y asesorar a empresas y organizaciones en Tierra del Fuego.

A través de la consultoría de Grupo Singular, se busca diseñar y pilotear un mecanismo de aplicación sistemática para el levantamiento de necesidades productivas, sobre todo de aquellas que se desarrollan en la provincia de Tierra del Fuego, considerando una revisión del estado actual de los sectores económicos, identificación de problemáticas y definición de desafíos de innovación.
Para Nicolás Mardones Ortega, encargado de Desarrollo Institucional del CFT de Magallanes y director de este proyecto, “esta alianza con Grupo Singular representa una oportunidad para canalizar y validar una serie de diagnósticos regionales y datos que ya se han levantado en proyectos anteriores de la consultora, dándole un foco especial en Tierra del Fuego, ya que sabemos que algunas necesidades regionales se manifiestan de manera especial en la provincia, en donde algunas brechas productivas pueden tener prioridades distintas al promedio regional. Es importante entonces que este proceso sea co-construido con empresas y organizaciones de la isla”.
Mauricio Ojeda, gerente de Grupo Singular, informó que el programa se encuentra en la etapa inicial de caracterización de sectores como el turismo y la ganadería, la identificación de desafíos productivos, y la revisión de mallas y perfiles de estudiantes con el fin de proponer la mejor modalidad de que todo esto pueda ser integrado al proceso formativo del CFT.
“Para nosotros resulta muy gratificante poder trabajar junto al CFT Estatal de Magallanes, y contribuir desde esta área, al fortalecimiento de la educación técnico profesional y su vinculación con las actividades productivas presentes en Tierra del Fuego y en la región en general”, afirmó Mauricio Ojeda.
Una vez concluido el trabajo, se espera haber transferido al CFT de Magallanes un método replicable en el tiempo, que permita implementar mejoras para fortalecer su vinculación con sectores productivos, ya sea a través de la actualización curricular de las carreras que imparte el centro de formación técnica, como también abriendo espacios de prácticas técnico-profesionales, programando visitas técnicas para conocer los procesos de producción, realizando desafíos de innovación abierta u otras alternativas, todo con tal de fortalecer la formación de los estudiantes vinculada a necesidades reales y en post de un beneficio de su entorno.